Dr. Enrique W. Alarcón Mtz. / Director médico, Nocrala Selarom / Dictamed / Enrique.alarcon@nocralaselarom.com / Twitter: @EnriqueWAlarcn1
En días recientes, dentro del chat que mantenemos abierto para comunicarnos con los exalumnos del Diplomado de Gastos Médicos Mayores, organizado por Dictamed y Revista Siniestro, uno de los integrantes preguntaba sobre la endometriosis, mencionando que se trataba de dudas técnicas sobre la enfermedad y sus secuelas o consecuencias. Por supuesto, hubo varias personas que intentaron responderle e incluso hubo un integrante que adjuntó dos ligas de internet para que el interesado leyera sobre el tema; sin embargo, nosotros decidimos contactarlo de manera directa para platicar con él sobre su necesidad.
Hablé por teléfono con el agente para saber exactamente por qué había surgido la pregunta en el chat. Él me comentó que una cliente con un producto de GMM de una compañía extranjera quería cambiar de aseguradora porque esta había aumentado su prima y ella quería evitar que en diez o quince años la póliza le resultara impagable. El problema radicaba en que la asegurada tenía un siniestro abierto por endometriosis, por lo que, al hacer la cotización para realizar el cambio, la nueva aseguradora agregaba un endoso de exclusión por endometriosis, abarcando las secuelas o consecuencias de esta.
El agente quería saber todo lo relacionado con la patología, para aconsejar bien a su cliente, y estaba dispuesto a invertir no solo horas, sino varios días en revisar y leer bibliografía médica de acceso general, para ayudarla. Esto es encomiable, pero equivocado, ya que el agente no tiene la obligación de entender cualquier asunto derivado de los seguros, mucho menos cuando se trata de algo tan complicado como la salud y las diversas patologías que atacan al ser humano. El proceso salud-enfermedad no es unidireccional, único y constante, porque las enfermedades ni se presentan ni se comportan ni reaccionan a un tratamiento de la misma manera.
Después de una llamada de quince minutos, resolví en persona las dudas del agente sobre la situación particular de su cliente. De esta forma, se solucionó con profesionalismo y rapidez algo que, en el mejor de los casos, le hubiera costado días conocer. De aquí la importancia de que los asesores tengan en su equipo a un médico dictaminador o contraten el servicio de un profesional con experiencia en el dictamen médico con aseguradoras. Por cierto, el agente pronto contratará nuestro servicio telefónico para la resolución de dudas y preguntas sobre el dictamen médico y la suscripción de seguros de GMM.
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