Jorge Carbajo Kalkach:. Estratega 360° / Twitter: @jorgecarbajo / Facebook e Instagram: Jorge Carbajo
En la micromanagement o microgestión, el líder controla y supervisa de forma excesiva y cercana el trabajo de sus colaboradores. Aunque algunos líderes piensen que este estilo de gestión asegura la calidad y precisión del trabajo, la micromanagement implica varios riesgos significativos que afectan de manera negativa tanto a los empleados como a la organización en general. Te invito a conocer siete de estos riesgos:

1. Desmotivación y baja moral. La micromanagement puede desmotivar a los colaboradores, pues les da a entender que no se confía en ellos para hacer su trabajo correctamente. Esta falta de autonomía disminuye la satisfacción laboral y la moral, lo que lleva a una mayor rotación de personal.
2. Reducción de la productividad. El control excesivo puede ralentizar el progreso, ya que los empleados se sienten paralizados y esperan constantemente la aprobación del superior para avanzar en sus tareas. Esto disminuye la eficiencia y productividad del equipo.
3. Falta de desarrollo de habilidades. Cuando los líderes supervisan y controlan cada detalle, los empleados no tienen la oportunidad de tomar decisiones y aprender de sus errores. Esto puede inhibir el desarrollo de habilidades importantes, como la de resolución de problemas y la de toma de decisiones autónomas.
4. Creatividad limitada. La creatividad y la innovación suelen florecer en entornos donde los colaboradores tienen la libertad de experimentar y proponer nuevas ideas. La micromanagement puede sofocar esta creatividad al imponer restricciones y limitaciones sobre cómo se deben realizar las tareas.
5. Estrés y agotamiento. Los empleados que son micromanejados pueden experimentar niveles elevados de estrés y agotamiento debido a la presión constante y la falta de control sobre su trabajo. Esto afecta negativamente su bienestar general y aumenta el riesgo de burnout. 6. Relaciones tensas. La micromanagement puede generar tensiones y conflictos entre el líder y los empleados. La falta de confianza y el sentimiento de ser constantemente vigilado deterioran las relaciones laborales, lo que afecta la cohesión y la colaboración del equipo.
7. Decisiones ineficientes. Al centralizar las decisiones en una persona (el micromanager), se puede perder la agilidad en la toma de decisiones y la capacidad de responder rápidamente a los cambios y desafíos del entorno. Esto pone a la organización en desventaja competitiva.
Estrategias para evitar la micromanagement
Para mitigar estos riesgos, los líderes pueden adoptar las siguientes estrategias:
• Fomentar la autonomía. Dar a los colaboradores la libertad de tomar decisiones y controlar su trabajo dentro de los límites razonables.
• Establecer expectativas claras. Comunicar claramente los objetivos y las expectativas para que los empleados sepan lo que se espera de ellos.
• Delegar tareas. Asignar tareas y responsabilidades a los empleados, confiando en su capacidad para cumplir con ellas.
• Proveer retroalimentación constructiva.
Ofrecer retroalimentación que ayude a los empleados a mejorar, en lugar de criticar cada detalle.
• Fomentar el desarrollo profesional. Apoyar el crecimiento y desarrollo de los empleados a través de la capacitación y las oportunidades de aprendizaje.
Al adoptar un enfoque de liderazgo más empoderador y menos controlador, los líderes pueden crear un entorno de trabajo más positivo y productivo, lo que beneficia tanto a los colaboradores como a la organización.
