Adrián Palacios Ramírez / Reportero, Revista Siniestro
En un reciente comunicado de Swiss Re Institute, Balz Grollimund, jefe de Peligros de Catástrofes, mencionó que, por quinto año consecutivo, las pérdidas aseguradas por desastres naturales exceden el límite de los 100 mil millones de dólares (mdd). Gran parte de estas pérdidas se atribuye al aumento del valor en áreas urbanas, al desarrollo económico y al incremento de los gastos de reconstrucción. Al intensificar las circunstancias que han causado gran parte de las catástrofes de este año, el cambio climático está jugando un rol cada vez más relevante. Por esta razón, es fundamental que la inversión en medidas de mitigación y adaptación se convierta en una prioridad.
En el comunicado se mencionó que las inundaciones aumentan en todo el mundo. En 2024, las intensas inundaciones en Europa y los EAU provocaron alrededor de 13 mil mdd en pérdidas aseguradas. Según las estimaciones del Instituto Swiss Re, este fue el tercer año más costoso con respecto a este tipo de riesgo a nivel global y el segundo más costoso en Europa, pues las pérdidas aseguradas fueron cercanas a los 10 mil mdd.
El país más afectado en 2024 fue Estados Unidos, pues en quince días dos fuertes huracanes impactaron la costa de Florida, dejando casi 50 mil mdd en pérdidas garantizadas: Helene el 27 de septiembre y Milton el 9 de octubre. Además, en 2024 se vivió una elevada incidencia de tormentas eléctricas o convectivas severas (SCS, por sus siglas en inglés), que afectaron principalmente a Estados Unidos. Se proyecta que las pérdidas aseguradas por SCS en 2024 superen los 51 mil mdd a nivel global, lo cual representaría la segunda pérdida más significativa tras el récord de casi 70 mil mdd en 2023.

