Adrián Palacios Ramírez / Reportero, Revista Siniestro
Durante la conferencia virtual organizada por la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), la directora general, Norma Alicia Rosas, compartió su perspectiva sobre el significativo desarrollo de los productos de seguros en el mercado mexicano a lo largo de los últimos 100 años. En su intervención, ella destacó cómo estos productos han sabido adaptarse a las cambiantes necesidades de los consumidores, incorporando avances tecnológicos y ofreciendo soluciones cada vez más personalizadas, y subrayó la relevancia de esta evolución en un contexto económico y social en constante transformación, resaltando su impacto en la protección financiera de la población.

La directora general también señaló que, en el país, el seguro de vida ha experimentado un crecimiento constante en el número de primas año tras año desde que finalizó la pandemia. Este aumento sostenido es un indicativo de los resultados positivos de la industria y refleja no solo una recuperación sólida, sino también un mayor interés de la población en la protección financiera y el bienestar a largo plazo. Este comportamiento puede ser interpretado como una respuesta a la incertidumbre generada por la crisis sanitaria global, la cual ha llevado a muchas personas a valorar aún más la seguridad que ofrece una póliza de vida frente a las situaciones imprevistas.

En la conferencia, también se habló del seguro de retiro. En las últimas décadas, la esperanza de vida ha aumentado significativamente gracias a los avances en la medicina, la nutrición y la calidad de vida en general, lo cual puede tener un impacto directo en los sistemas de pensiones y en la planificación financiera de los individuos para su jubilación. Por eso, el seguro de retiro funciona como un ahorro a largo plazo para disfrutar una vejez digna sin preocupaciones.
Por último, Norma Alicia Rosas mencionó la importancia de complementar nuestro plan de retiro con un seguro educacional si tenemos hijos, ya que este producto nos permite planificar el pago de su educación futura y dejar esta completamente respaldada, evitando sorpresas económicas cuando llegue el momento de cubrir los gastos, incluso si ocurre nuestro fallecimiento.
