Adrián Palacios Ramírez / Reportero, Revista Siniestro
Platicamos con Ricardo McQuattie y Ricardo Correa, líder global de Siniestros y director de Siniestros respectivamente de Cargo Corp. A través de ellos conocimos más sobre la visión y misión de la empresa que representan, la cual tiene como objetivo principal la gestión integral de riesgos que permite a sus clientes adoptar un enfoque estructurado para abordar los riesgos sistemáticos y no sistemáticos. La compañía logra esto mediante la valoración de riesgos y la implementación de estrategias eficaces para mitigar el impacto de estos, apoyándose en un personal capacitado en la administración de riesgos logísticos y asegurables.
Durante la entrevista, Ricardo Correa comentó que Cargo Corp evalúa los riesgos con sus propias y diversas herramientas, las cuales se aplican en diferentes áreas, como construcción, seguridad y almacenamiento, y permiten evaluar de manera integral el transporte, abarcando desde la logística de las operaciones hasta las necesidades específicas de cada cliente, lo cual facilita la identificación de los riesgos y las vulnerabilidades que cada asegurado enfrenta. Con estas herramientas, el equipo de evaluación de riesgos realiza las primeras supervisiones desde la etapa de presuscripción.
Tras la evaluación, inicia la adecuada capacitación del equipo del cliente, que garantiza la efectiva gestión de los riesgos porque los asegurados tienen acceso directo a los resultados de la evaluación, lo cual les permite compartir la información con sus empleados y dar el seguimiento adecuado a las problemáticas. Esta capacitación es continua y de fácil acceso, lo cual garantiza un aprendizaje constante y oportuno.
Aprendamos de lo que ya nos pasó: El siniestro cero Ricardo McQuattie señaló que, al menos en Latinoamérica, los casos más frecuentes registrados por la compañía son los robos de mercancía. Después, nuestros entrevistados nos compartieron un siniestro ocurrido en Colombia, que utilizan como ejemplo de prevención de riesgos y que afectó a la primera póliza de STP colocada en ese país en diciembre de 2009. El caso ocurrió en enero de 2010, tan solo un mes después de la activación de la suscripción, e involucró a un cliente que realizaba operaciones de almacenamiento y administración de inventario para una importante firma automotriz, el cual adquirió una bodega ubicada muy cerca de una central termoeléctrica.
En la primera evaluación de riesgos realizada, se detectó que la planta termoeléctrica operaba con gas combustible, lo que hacía poco probable la emisión de partículas; sin embargo, diez días más tarde, la planta cambió su fuente de combustible por diésel, lo que provocó que la caldera emitiera una gran cantidad de partículas, las cuales se dispersaron por toda la zona, cayeron en la bodega del asegurado, donde se encontraban alrededor de 600 vehículos, y afectaron el 90% de las unidades almacenadas. Debido a ello, se procedió a rápidamente lavar y cambiar de ubicación todos los vehículos, tras lo cual se iniciaron acciones legales contra la planta responsable y se desplegó un equipo de laboratorio para analizar las partículas en la caldera de la planta causante del daño, lo cual permitió reunir la información y las pruebas necesarias para facilitar la posterior recuperación.
El siniestro costó aproximadamente 5 mil millones de pesos colombianos. Gracias a la difícil operación de limpieza y tratamiento de pintura, se logró reducir la pérdida a 4 mil millones de pesos colombianos. Así pues, a pesar de la magnitud del siniestro, se mitigó la pérdida con una actuación rápida y eficaz. A raíz de este evento, la compañía adoptó el lema “Aprendamos de lo que ya nos pasó” y su equipo de prevención evalúa de una forma más meticulosa cualquier posible riesgo.
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